Al término de la discusión -en la madrugada- de los 20 puntos de la agenda de la sesión extraordinaria, el pleno del Congreso de la Ciudad de México decidió realizar de inmediato el acto de clausura de la I Legislatura.
Usando su voz, el presidente de la Consejo de Coordinación Política (Jucopo), Víctor Hugo Lobo resaltó que esta legislatura “es y será histórica porque tuvimos la enorme responsabilidad de analizar, modificar y adecuar la Constitución de la Ciudad de México que dio origen a la realidad que vivimos y generar el andamiaje normativo que se deriva de estas”. .
Reconoció a todas las fuerzas políticas por su capacidad para buscar acuerdos y eso es lo que dijo en los tres años de trabajo, se aprobaron más de 237 acuerdos, de los cuales 91 son a partir de 2021.
“Entre las grandes diferencias, pudimos encontrar muchas coincidencias y pudimos garantizar que el 98% de los acuerdos fueron por consenso”, resaltó.
Agregó que la emergencia sanitaria fue un desafío para la COVID-19, porque tuvieron que adaptarse a la normativa presencial y virtual para no paralizar el trabajo legislativo y, así, cuidar la salud de todos los integrantes.
Dijo que se cumplió con lo dispuesto en la Constitución, ya que se creó la memoria descriptiva y legislativa del trabajo de las 40 comisiones; “Es un documento robusto y completo, que refleja la pluralidad de este Congreso, pero sobre todo quedan los avances que hemos aportado a este capital”.
“Este documento se puede recolectar un poco más tarde, pero si no lo hacemos, nos estaremos refiriendo a donde usted indique, será un documento histórico para todos los ciudadanos de la capital y para cada uno de nosotros”, dijo. Agregó que el martes se develará una placa en reconocimiento a la Primera Legislatura.
A su vez, el presidente de la Junta Directiva, Ana Patricia Baez Coincidió con Lobo y dijo que la pandemia “fue un desafío, que aunque sorprendió a varias autoridades, este Congreso actuó de manera adecuada para no demorar los trabajos”.
Agradeció a todos los legisladores y al Coordinación de servicios parlamentarios, la confianza depositada en ella durante los últimos seis meses en los que se desempeñó como presidenta de la junta directiva; “Esta responsabilidad se convirtió en mi prioridad y la asumí como la más relevante de mis tareas como diputado y la más importante profesionalmente que tenía”.
“Debido a la situación de pandemia y el regreso a las reuniones presenciales, tomé posiciones que para algunos pueden parecer intransigentes y muy rígidas para garantizar la seguridad sanitaria de todos los presentes y en ocasiones incómodas para diputados y empleados”, reconoció.
Finalmente, deseó mucho éxito a los legisladores de la Segunda Legislatura.
SSB